“Pasamos demasiado tiempo de nuestra vida alejándonos de lo que no queremos en lugar de vivir cada día con la ilusión de acercarnos a aquello que más valor tiene para nosotros.”

Despertar tiene que ver con vivir conscientemente y poder expandir nuestro nivel de conciencia. Involucra vivir conectados con nosotros mismos, estar atentos a lo que necesitamos y sentimos en lugar de vivir en piloto automático.

Concibo a la Prosperidad como la experiencia de tener suficiente de todo aquello que necesitamos y más valoramos. No se trata de tener un poco, algo o mucho de eso que necesitamos, sino de tener lo suficiente. Es un estado de ánimo, al que nos conectamos. La prosperidad puede ser definida también como un estado de consciencia en el cual vivimos, alineados con quienes somos e inspirados por un propósito de vida trascendente.

Vivir en la prosperidad involucra abrazar 3 creencias:

• Es posible ser prósperos y materializar la vida que visualizamos y anhelamos.
• Podemos ser prósperos, al contar con los recursos que necesitamos para lograrlo. Todo lo que conforma nuestra vida está ahí para ayudarnos a expandir nuestra conciencia, madurar y volvernos personas cada día más prósperas.
• Nos merecemos ser prósperos. Sentirnos merecedores de lo mejor y nunca conformarnos con menos que eso.

La prosperidad la vamos a trabajar desde las cuatro dimensiones que nos hacen personas: la dimensión física, mental, afectiva y espiritual.

A su vez, vamos a trabajar en la prosperidad en cinco áreas o ámbitos específicos:

• la prosperidad en relación con el vínculo con nosotros mismos.
• la prosperidad en relación con el vínculo con los demás.
• la prosperidad en relación con el tiempo.
• la prosperidad en relación con el trabajo.
• la prosperidad en relación con el dinero.